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jueves, 28 de marzo de 2024 08:28h.

Amigos de Ajabo asegura que el cierre del campo de tiro y las consecuencias judiciales son inminente

La Asociación amigos en defensa de Ajabo asegura que el cierre del campo de tiro municipal de Adeje es inminente y sus consecuencias judiciales también por la cabezonería de mantener abierto esta tropelía a los vecinos y al medio ambiente.

 

CAMPO MUNICIPAL DE TIRO ADEJE
Amigos de Ajabo asegura que el cierre del campo de tiro es inminente

El hecho de que el Consejo Insular de Aguas haya tomado la decisión de tramitar la suspensión de las actividades que originan contaminación en el Barranco es debido a las diversas denuncias interpuestas por esta asociación y, especialmente por interponer una denuncia ante la fiscalía anticorrupción contra el CIATF, por entender que se está dando un trato de favor político al Ayuntamiento de Adeje, entendiendo al mismo tiempo que se está cometiendo un acto de prevaricación por parte del organismos autónomo del Cabildo, dirigido por Consejero Manuel Martínez, al no aplicar la legislación vigente.

De hecho el CIATF requirió al Ayuntamiento este permiso cuando la Agencia de Protección del Medio Natural abrió expediente sancionador al Ayuntamiento, tras las reiteradas denuncias de la Asociación. Negándose en todo momento a tramitar la suspensión de las actividades del campo de tiro mientras se tramitaba la autorización para verter residuos, calificada por el colectivo vecinal como una vergüenza que se pretenda dar autorización para contaminar con plomo, plástico, platos y otros residuos a un barranco. Fue cuando la fiscalía abrió diligencias penales contra el CIATF en el momento donde se plantearon la suspensión de las actividades de tiro al plato. 

El colectivo vecinal afirma que la legislación sobre los vertidos determina que todo vertido de líquidos y de productos susceptibles de contaminar las aguas superficiales y subterráneas o degradar el dominio público hidráulico requiere autorización administrativa, que ha de ser emitida por el Consejo Insular de Aguas, sin que desde el Cabildo Insular de le haya requerido al Ayuntamiento esta autorización desde el año marzo de 2013,  fecha que reabrieron las actividades del campo de tiro, además la Ley de Aguas de Canarias estipula que el Consejo Insular de Aguas ordenará la inmediata suspensión de las actividades que den origen a vertidos no autorizados, sin que aún y con las denuncias interpuestas, haya actuado en consecuencia.

Este tema de vulneración de la legislación salpica también al Ayuntamiento de Adeje, pues como institución publica debe ser exquisita, ejemplar y ejemplarizante en las tramitaciones de autorización, tanto cuando las concede como cuando las solicita, y siendo conocedores de los requisitos para arrojar vertidos al barranco nunca solicitó autorización alguna, sino cuando ha visto el requerimiento del Cabildo, por las insistentes denuncias del colectivo vecinal.

Amigos de Ajabo recuerda que esta no es la única irregularidad en este campo de tiro, ya en su principio le dieron la razón cuando denunciaron que el Ayuntamiento no tenía los permisos para el uso del espacio público hidráulico de seguridad, tal y como determina el reglamento de armas y, tras las denuncias del colectivo fue cuando lo tramitaron, entendiéndose por parte de la asociación que se dio contrario a derecho y cuya autorización se encuentra en proceso de instrucción en el juzgado de Arona.  

Desde el colectivo opositor a este campo de tiro, aseguran que las 25 toneladas de plomo que dicen que existen en el barranco es una cantidad que puede quedarse corta, ya que esta información sale de un informe hecho por una empresa contratada por el ayuntamiento de Adeje y, probablemente se haya hecho ad hoc.

Los miembros de la asociación amigos en defensa de Ajabo afirman que el Ayuntamiento de Adeje y el Cabildo tinerfeño se han metido en un pozo y, en lugar de escalar para salir siguen cavando hasta quedar sepultados y, prueba de ello es que una vez conocida las acciones del Cabildo, este fin de semana han celebrado otro campeonato de tiro al plato, más plomo y otros residuos arrojados al barranco, reprochan.