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viernes, 29 de marzo de 2024 00:49h.

No hay vías para tanto coche, una semana santa de caos circulatorio para Los Cristianos

La actividad portuaria durante las próximas vacaciones de semana santa, en la localidad costera de Los Cristianos, Arona, hace prever un importante incremento del tráfico de vehículos y personas que, sin duda, ponen en jaque las estrechas y obsoletas vías de esa localidad, a la espera, desde hace años, de un “estudio de movilidad”, determinante.

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Se prevé el colapso por el incremento de la actividad portuaria y la falta de solución viaria

En la actualidad, los principales responsables interesados en encontrar una solución han mantenido dos encuentros con el objetivo de planificar las actuaciones necesarias para mejorar no sólo la entrada y salida al puerto, sino los accesos entre Los Cristianos y la autopista del Sur.

Las administraciones competentes, Autoridad Portuaria, Cabildo de Tenerife y de La Gomera; Comunidad Autónoma y Ayuntamiento de Arona, se reúnen en épocas concretas para paliar los efectos negativos de la presión circulatoria que sufre la localidad turística. Verano, vacaciones de navidad y las propias de semana santa.

Sin embargo, vecinos y comerciantes de la zona consideran que las medidas que se toman son simples parches momentáneos. “Pan para hoy y hambre para mañana”, resaltan,  ya que mientras la presión aumenta, las soluciones adoptadas no resuelven el caos circulatorio que se genera en torno al puerto. Refuerzo de la plantilla de la Policía Local para redistribuir el tráfico, colocación de señales nuevas y mejoras en el pavimento, así como,  incremento de viajes de las líneas de barcos, resultan insuficientes, a todas luces. En definitiva, para los lugareños que sufren esa presión, con escasos incentivos económicos, “todo crece en un ámbito territorial viario que permanece igual desde hace décadas”.

Para  este año, la recuperación económica y el aumento del descuento de residente canario al 75 por ciento ha disparado los índices de ocupación tanto en el transporte marítimo como en el aéreo, circunstancia que incidirá en la localidad costera, sobre la que el propio alcalde, el socialista José Julián Mena, ha manifestado su preocupación por la gran afluencia de viajeros que hacen temer un colapso en la circulación del en el entorno portuario,  a causa de sus limitadas dimensiones.

La semana santa puede ser el aviso de un verano también crítico, en lo que a la circulación viaria se refiere, en el segundo puerto del Reino de España, en tráfico de pasajeros y vehículos. Cerca de 400.000 coches salieron o entraron del muelle sureño en 2017; un 15 por ciento más que en 2016, mientras que el número de usuarios rozó los 1,9 millones, casi el 10 por ciento más que el año anterior.