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viernes, 29 de marzo de 2024 00:49h.

Madrid bloquea el Puerto de Fonsalía para impedir el desarrollo de Tenerife

Óscar Izquierdo presidente de FEPECO es contundente al señalar que: “a nadie se le oculta la importancia de tener un puerto operativo y eficiente en la costa oeste de Tenerife para las comunicaciones con La Gomera, La Palma y El Hierro. Es la conectividad marítima deseable. Se podría analizar hasta su tamaño óptimo, pero nunca la posibilidad de no construirlo. 

Oscar Izquierdo, presidente de FEPECO 15-03-2_Fotor
FEPECO requiere a los políticos tinerfeños más valentía para defender nuestras infraestructuras

El Informe del 16 de octubre de 2018 de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar, conocido públicamente ahora, expone los Antecedentes de la tramitación administrativa seguida para el puerto de Fonsalía desde 2001 hasta la fecha. Cabe destacar como hitos relevantes: el sometimiento a información pública del Proyecto del puerto y de su Estudio de Impacto Ambiental, el 17-12-2010 y la solicitud por el Gobierno de Canarias a COSTAS de la transmisión del Dominio Público Marítimo Terrestre (DPMT) necesario para el puerto, el 30-01-2015.
 
Desde el 2010, información pública, hasta la fecha, ha habido numerosos informes y contrainformes por ambas partes. De un lado, el Estado, Costas y Autoridad Portuaria, y de la otra el Gobierno de Canarias, Consejería de Obras Publicas con Puertos Canarios y Medio Ambiente. El primero siempre oponiéndose a la construcción del puerto con argumentos que muchas veces parecen excusas y el segundo tratando de subsanar y contrarrestar el argumentario del Estado.

Mientras tanto, el ciudadano perplejo y sufriendo los atascos de tráfico de Los Cristianos cada vez mayores e insufribles, con costes de productividad significativos para las empresas. Las autopistas marítimas tienen que contar previamente con los puertos adecuados.
 
El Informe ahora conocido hace una serie de consideraciones basadas en leyes y reglamentos vigentes. En nuestro inflacionario marasmo legal, parece que es fácil encontrar excusas legales para cualquier cosa y sobre todo, para frenar iniciativas productivas en Tenerife.

No podemos olvidar que lamentablemente en este país, tenemos leyes, reglamentos, órdenes ministeriales, autonómicas y locales para justificar cualquier cosa y la contraria. Analiza el citado Informe el Proyecto del Puerto, el Estudio y la Declaración de Impacto Ambiental del mismo, con argumentos para todos los gustos. Algunos pueden parecer banales, otros son claramente extemporáneos, otros difíciles de sostener, sin olvidar que no dejan en buen lugar a Puertos Canarios.  

Mientras cobran suculentos sueldos del erario público, los responsables políticos y funcionariales, lo único que han hecho es perder el tiempo durante casi 10 años, en discusiones, informes y contrainformes, para llegar al final a informar desfavorablemente la solicitud del Gobierno de Canarias de adscripción de dominio público marítimo terrestre con destino al nuevo puerto-isla de Fonsalía, hasta que no se subsanen algunos aspectos, que por su irrelevancia no son la razón de que el Estado deniegue la transmisión de dominio para el puerto, son precisamente la excusa, con la que se impide el desarrollo sostenible de Tenerife.
 
Oscar Izquierdo presidente de FEPECO sostiene que “la única posibilidad que tiene el Puerto de Fonsalía para que sea construido es un frente común de la sociedad tinerfeña exigiendo su construcción que posibilite un acuerdo marco entre el Estado y el Gobierno Canario, que impulse dicha infraestructura, porque de otra manera, los técnicos de ambas administraciones seguirán discutiendo indefinidamente, sin encontrar soluciones ni puntos de encuentro.

Pero dada la cuantía de la inversión del proyecto actual y que la mista física del mismo está destinado a marina deportiva susceptible de ser concesionada a particulares, caben soluciones de ejecución del proyecto por fases que eviten una nueva y extenuante tramitación administrativa del proyecto, evitando así más dilaciones interpretativas por parte de los pone pegas profesionales, muy abundantes en nuestras administraciones”.