Añadió que tomando como referencia el PIB, en 2018 representaba el 6,48 por ciento y en el proyecto de 2019 es del 6,32 por ciento, muy por debajo del 7,18 por ciento que supuso el gasto sanitario hace diez años. “Usted podrá disfrazar las cifras y expresará su alegría por contar con el mayor presupuesto de la historia en materia sanitaria, pero no siga ocultando que se convierte en una oportunidad perdida por el descenso en el esfuerzo del gasto”, dijo al consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, en comisión parlamentaria. 

Hernández  lamentó la “euforia interesada”, la “autocomplacencia” y la “falta de autocrítica” del Gobierno de Clavijo, “que vende las falsedades como logros y hazañas”. Precisó que en estas cuentas, el gasto global del Servicio Canario de Salud aumenta un 2,64 por ciento, muy alejado del crecimiento general del presupuesto en su conjunto, por lo que lamentó la falta de “valor, osadía y capacidad” del consejero por “no imponerse para defender unos servicios que nos igualen más a todos”.
 
El diputado del PSOE lamentó que el Ejecutivo de Fernando Clavijo “no haya sido capaz de priorizar lo importante, como lo demuestra el hecho de que Baltar no pelee por unas cuentas que hagan frente a los problemas que acucian a nuestro sistema público de salud”. Ejemplo de ello, continuó, es la escasa posibilidad de poder afrontar planes de choque contra las listas de espera sanitaria si en capítulo uno, los incrementos de gasto van a estar condicionados por los incrementos salariales de los empleados públicos y el reconocimiento de la carrera profesional.
 
En cuanto a las muchas iniciativas aprobadas en la Cámara en materia sanitaria, recordó que continúan “durmiendo en los cajones el sueño de los justos” y sostuvo que no aprovechar la herramienta más poderosa que tiene un Gobierno como son los recursos presupuestarios para mejorar la situación es “una irresponsabilidad política”.
 
Marcos Hernández dijo que cuando algún organismo público cuestiona la gestión y los datos de la Consejería, a su responsable “le falta tiempo para matar al mensajero, como sucedió estos días con la denuncia que hacía la Defensora del Paciente a Baltar y a Clavijo por dejación de funciones”. Explicó que, tal vez, esa denuncia está directamente relacionada con la falta de transparencia de las propias listas de espera, por impedir poner al servicio del control público un sistema de seguimiento continuo, que fue la apuesta del PSOE cuando dirigió el área regional.
 
Agregó que “mucha propaganda tendrá que vender” el consejero para tratar de justificar que descienda la inversión en capítulo seis de atención especializada de 44 a 36 millones de euros mientras persisten enormes listas de espera precisamente en este tipo de atención, o cómo los esfuerzos presupuestarios en materia de Salud Pública siguen siendo tan pírricos, a sabiendas que ahí está residenciada todas las políticas preventivas orientadas a prevenir la enfermedad, prolongar la vida y mejorar la salud.
 
Hernández consideró “llamativo” que el tercero de los objetivos específicos contemplados en el proyecto de ley sea, literalmente, “concertación con otros centros sanitarios de facetas específicas y reguladas de la actividad asistencial, con el objetivo básico de la disminución de la lista de espera estructural para acceder a intervenciones quirúrgicas, pruebas complementarias y consultas de especialidades”.  “Parece todo un anticipo de aquello que desde el PSOE hemos venido denunciando dentro y fuera de la Cámara”, expresó.
  
Para terminar su intervención, el diputado recordó que el PSOE presentará una enmienda a la totalidad. “Si yo tuviera la capacidad, presentaba dos: una al presupuesto y otra a quienes se les ha encomendado la tarea de su ejecución, porque ni las cuentas ni este Gobierno están a la altura de lo que necesita Canarias”.