Se trata del segundo listado de becas universitarias, con el que se resuelven las últimas 8.981 solicitudes de este curso: ya en el mes de diciembre, dos meses después del inicio del curso académico en las universidades, 1.003 estudiantes recibieron su ayuda, tras resolverse más del cincuenta por ciento de las peticiones. 

La consejera de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias, Soledad Monzón, destacó que este curso se ha dado “un paso más en el adelanto del pago de las becas, con medidas centradas en agilizar los trámites para acortar los plazos de resolución”, un trabajo que, indicó, “ha permitido que alrededor de mil estudiantes universitarios ya recibieran su ayuda en diciembre, apenas dos meses después de iniciar el curso en la universidad”. 

“Con la publicación de este segundo listado, completamos el proceso un mes antes que el curso pasado”, destacó la consejera que señaló que tras aplicar medidas de mejora en la gestión “el alumnado de menor renta recibe cuatro meses antes su beca que hace tres años”. 

El adelanto en el pago de las becas universitarias forma parte de la batería de medidas dirigidas a garantizar la equidad en el acceso al sistema de educación superior, introducidas por la Consejería de Educación y Universidades. El Gobierno autonómico ha iniciado en los últimos años distintas iniciativas, con el objetivo de “apostar por el talento, por el conocimiento, y poner nuevas facilidades para que ningún estudiante de Canarias deje de estudiar por motivos económicos”, señaló la titular de Educación. 

Así, a la mejora de los trámites de solicitud y resolución de becas se unen medidas adicionales, como la reducción de los costes de matrículas universitarias, una iniciativa para la que el Gobierno de Canarias ha destinado 3,6 millones de euros: desde este curso, los estudiantes universitarios han visto reducidos los precios públicos de grado en un ocho por ciento de media y un quince por ciento en los precios de máster en las universidades públicas del Archipiélago.
Para el próximo curso, el Gobierno reducirá aún más los precios de matrícula: un 10 por ciento en grado y un 17,5 por ciento en másteres de media, tal como anunció el presidente del Gobierno de Canarias durante el Debate de la Nacionalidad Canaria, el pasado mes de marzo.

En esta misma línea de atención a alumnado de educación superior con mayores necesidades económicas, la Consejería de Educación y Universidades ha puesto en marcha distintas medidas adicionales, como las ayudas al desplazamiento para realizar estudios superiores, con las que el ejecutivo autonómico abona cuatro trayectos para estudiantes que deban abandonar su lugar de residencia para cursar los estudios de su elección, o el fraccionamiento del pago de matrícula universitaria en seis plazos o la reducción de los precios públicos de estudios universitarios.

Las becas universitarias, en cifras

En total, la Consejería de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias ha resuelto este curso 17.069 peticiones de becas universitarias, de las que 5.669 han sido concedidas (5.458 estudiantes de grado y 211 de máster) y 11.400 denegadas. De las solicitudes denegadas, 7.666 lo han sido por cumplir con los requisitos para obtener la beca del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes, que excluye de la del Gobierno de Canarias. 

El resto de denegaciones responden a motivos económicos y académicos, entre los que destacan 1.819 casos de solicitantes que no cuentan con los créditos mínimos aprobados. 

La convocatoria de becas estableció una serie de novedades este curso escolar, entre las que destaca la mejora de las cuantías destinadas a estudiantes con discapacidad, con la incorporación de nuevas cuotas adicionales para todos los becarios que presenten discapacidad superior al 33 por ciento, ya sean beneficiarios de becas del Gobierno de Canarias como beneficiarios de las becas estatales del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes: 600 euros en el caso de una discapacidad comprendida entre el 33 y el 49 por ciento, 900 euros en casos de discapacidad entre el 50 y el 65 por ciento, y 1.500 euros en casos de discapacidad superior al 65 por ciento.

Además, este curso se indicaron también parámetros más flexibles en el rendimiento académico para determinadas enseñanzas, estableciendo requisitos diferenciados entre los estudiantes de ingeniería y arquitectura, que deberán superar un 50 por ciento de lo obligado a matricular, estudiantes de enseñanzas de ciencias, que deberán superar un 65 por ciento de los créditos, y el resto de enseñanzas, que mantienen la exigencia de un 70 por ciento. En anteriores convocatorias, el rendimiento exigido era de un 50 por ciento para estudiantes de ingeniería y arquitectura y un 70 por ciento para el resto de enseñanzas.

También se flexibilizaron los parámetros académicos exigidos en las enseñanzas de máster, cuyo requisito este curso fue contar con una nota media de cinco en el grado, frente a la media de seis exigida hasta el momento.