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sábado, 20 de abril de 2024 00:00h.

El ICI impulsará medidas para mejorar la visibilidad y protección de las mujeres con discapacidad

El Instituto Canario de Igualdad (ICI) se ha comprometido con dos entidades de referencia en atención a la discapacidad como son la ONCE y el CERMI (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad) a colaborar e impulsar medidas y políticas que permitan visibilizar y dar mayor protección a las mujeres con discapacidad que residen en las Islas. 

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De las 6.000 mujeres registradas en la base de datos de demandantes de empleo de la ONCE (Inserta Empleo) en Canarias, más de 200 han manifestado estar en una situación de violencia de género

Este fue uno de los principales compromisos que asumió la directora del ICI, Kika Fumero, tras el encuentro que mantuvo con Teresa Palahí, secretaria general de la Fundación ONCE; Miguel Ángel Déniz Méndez, presidente de la Fundación ONCE en Canarias; Luis Cayo Pérez Bueno, presidente del CERMI, y Carmen Lauzirika, presidenta en Canarias de esta entidad.

El 60% de las personas con discapacidad en Canarias son mujeres, por tanto, se hacen necesarias políticas de igualdad específicas para ellas. Fue uno de los datos que se puso sobre la mesa durante el encuentro que mantuvieron ayer las tres entidades. 

“Hemos puesto sobre la mesa la voluntad e intención de colaborar conjuntamente y hemos abierto la puerta a varias líneas de actuación. Trabajaremos con la ONCE y CERMI para visibilizar a las mujeres, medir y desarrollar acciones y políticas públicas que ayuden a mejorar la vida de estas mujeres”, aseguró la directora del Instituto Canario de la Mujer, Kika 
Fumero. 

Durante el encuentro, también se acordó sobre la importancia de establecer medidas concretas para los casos de violencia de género de mujeres con discapacidad. De hecho, la Fundación ONCE expuso que, de las cerca de 6.000 mujeres que están registradas en su base de datos como demandantes de empleo en su programa Inserta Empleo en las Islas, más de 200 han manifestado sufrir violencia de género. 

La directora mostró su preocupación expresa sobre las mujeres con discapacidad que además sufren o han sufrido violencia de género. “Estas mujeres padecen, además, el agravante de que no se sienten creídas ni escuchadas pues su voz al sufrir una discapacidad no se legitima y, por lo tanto, suelen callar más y vivir aún más en silencio que la media esta situación”.