Las investigaciones se iniciaron a finales del pasado año, cuando se detectaron una serie de robos en la zona de Aguagarcia, con similar modus operandi, hechos perpetrados en diversas viviendas, establecimientos comerciales y cuartos de aperos.

Durante varios meses, los agentes de la Guardia Civil realizaron diversas gestiones que con la ayuda de la colaboración ciudadana, lograron iniciar una línea de investigación a partir de los datos que se iban obteniendo, consiguiendo identificar a un primer acusado.

A partir de ese momento, se establecieron vigilancias encaminadas a la averiguación e identificación de otros posibles implicados.

Finalmente, se logró identificar a los otros 3 acusados de la comisión de los citados delitos contra el patrimonio, así como recuperar numerosos efectos de los que habían sido sustraídos, tales como televisores, equipos de sonido, herramientas, etc.

Cabe destacar que una parte de los citados objetos eran almacenados en una vivienda y otros habían sido vendidos a terceras personas, siendo finalmente recuperados y entregados por la Guardia Civil a sus legítimos propietarios.

Los efectos sustraídos en los diferentes robos fueron valorados por sus propietarios en 50.000 euros aproximadamente.

Se da la circunstancia de que los autores de los robos son delincuentes comunes que cuentan con numerosos antecedentes delictivos por delitos contra el patrimonio.