Previamente, cientos de personas se dieron cita para asistir a una eucaristía, en la que el párroco de San Pedro, Pedro Rodríguez, destacó la importancia que tiene para los güimareros esta imagen. 

La Virgen de El Socorro estuvo todo el tiempo acompañada de su camarero, Pedro Campos, así como de la alcaldesa de Güímar, Carmen Luisa Castro, y de miembros de su grupo de gobierno. Además se activó un dispositivo de seguridad, compuesto por policía local, guardia civil, protección civil y bomberos, que veló por todos los asistentes.

Las campanas fueron las encargadas de recibir a los peregrinos y a la virgen en el Monasterio que lleva el mismo nombre. En este lugar hizo una de sus paradas, ya que anteriormente lo había hecho en la ermita de El Calvario, como lo hace tradicionalmente cada 7 y 8 de septiembre. 

Uno de los momentos más emotivos fue la bendición del ‘Banco del Peregrino’, un lugar sencillo, de descanso y de recuerdo para los que ya no están. La alcaldesa destacó que “es un símbolo de sencillez, como lo es la Virgen de El Socorro y el pueblo de Güímar”. Este banco cuenta actualmente con cerca de 400 mosaicos con los nombres de personas ya fallecidas, a las que sus familias quieren que se les recuerde. 

Llegada la noche, los peregrinos entraron en el camino que bordea la montaña de El Socorro y finalmente llegaron al caserío donde fueron recibidos por algunos de sus vecinos. 

Mañana jueves, los niños guanches recrearán la ceremonia a partir de las 5 de la tarde y a las 8 ‘Los Sabandeños’ ofrecerán un concierto.