Marco Antonio Cabrera Gil ha recibido la noticia con mucho entusiasmo e ilusión porque tiene recuerdos muy bonitos y entrañables de su infancia en este barrio que lo vio nacer. Sin duda alguna, para este teldense el hecho de que se hayan acordado de él para ser el pregonero de las fiestas no deja de ser una enorme responsabilidad y un gran orgullo.

Cabrera Gil recuerda una infancia en la que compartió momentos de mucho juego y cariño con su familia y un gran número de amigos. “En la década de los años 70, los niños nos divertíamos jugando a la piola, al escondite o al calimbre, entre otros juegos” . También señala que se jugaba mucho al fútbol y que solo había que colocar dos piedras para determinar las porterías.

Por otro lado, a este empresario le viene a la memoria también el molino de Isaac y cómo se procedía a la bajada del trigo para hacer el gofio. Además, señala que la ciudad de Telde contaba con un número destacado de molinos que inicialmente introdujeron cereales hasta que se fueron transformando en molinos de gofio. “Ese olor a gofio recién molido era único” destaca este empresario canario.

Marco Antonio Cabrera Gil siempre fue un niño vital, lleno de energía y con mucho carácter. Esto determinó que pronto se interesara por el deporte y comenzara a practicar atletismo y balonmano con excelentes resultados deportivos en el ámbito nacional. Su carácter emprendedor le llevó a dedicarse a los negocios a temprana edad, por esa razón con 19 años constituyó su primera empresa. Pero su inquietud, le llevó a saltar fronteras y vivir varios años en Venezuela donde ejerció como coach e impartió seminarios, charlas y jornadas para dirigentes políticos, empresarios y altos directivos.

El pregón de Marco Antonio Cabrera Gil estará centrado principalmente en los momentos de alegría y unión que vivió a temprana edad en el barrio de San Gregorio el Chico y que fue forjando su carácter y forma de ser hasta convertirlo en un hombre de compromiso social.