La titular del departamento autonómico señaló que el desarrollo de los planes que completarán la implantación de la Ley Canaria de Educación no Universitaria “traerá cambios, que consoliden una educación de mayor calidad aún, con mucha más atención a las diferencias, una preparación sólida en idiomas y, sobre todo, una educación inclusiva, en la que los centros no sean lugares aislados, sino en permanente contacto con la sociedad de su entorno más inmediato”.

Entre las medidas más significativas, Soledad Monzón resaltó, dentro del Plan de reconocimiento profesional y social del profesorado, el reconcimiento público a sus buenas prácticas, para ponerlas en valor ante la sociedad, la atención y protección en el desarrollo de sus funciones, y que a partir del 1 de enero se comenzará a implantar el nuevo modelo retributivo, basado en el cobro de sexenios en función de la formación continua que demuestre y en complementos por ejercer tareas de responsabilidad, como la tutoría de grupo.

Con respecto a las novedades que traerá el Plan estratégico de atención a la diversidad, durante su intervención explicó que, a través del programa Impulsa, más de 260 docentes se dedicarán al apoyo, sobre todo en materia de competencias lingüísticas y matemáticas, para el alumnado de Infantil y los dos primeros cursos de Primaria. El objetivo es dar una mayor atención temprana, facilitar el tránsito entre infantil y primaria y realizar un acompañamiento más individualizado al alumnado que más lo necesite, que redunde en mejores resultados futuros y en la reducción del absentismo escolar y, posteriormente, del abandono escolar temprano.

Dentro de ese plan estratégico de atención a la diversidad, que incluye la puesta en marcha de 13 nuevas Aulas Enclave, también se incorporan el próximo curso las figuras nuevas de Educadores Sociales, con 36 de inicio, hasta completar el número de 86 cuando se finalice la implantación del plan, y de Terapeutas Ocupacionales, que serán 13 y trabajarán en los centros de educación especial.

Además, se refuerzan los Equipos de Orientación Específicos y Psicopedagógicos, con 13 orientadores más y 11 docentes especialistas en Audición y Lenguaje.

En cuanto a los avances derivados del Plan de impulso de las lenguas extranjeras, implantado desde el curso 2016-2017, se incrementa la aportación de la Comunidad Autónoma al programa de Auxiliares de Conversación, con fondos para 96 más, hasta alcanzar los 170, financiados por Canarias. También dentro del PILE, 50 docentes pudieron disfrutar este verano de cursos de especialización de un mes en países de habla inglesa y 160 más pasarán un trimestre completo durante este curso 2017-2018 en países anglófonos, para estudiar tanto la lengua, como los métodos de enseñanza en una lengua diferente a la materna.

Soledad Monzón indicó que también habrá innovaciones en otras áreas y otros planes, como el de Modernización Tecnológica, para el que el Consejo de Gobierno aprobó el pasado mes de julio, por ejemplo, una partida de  6,6 millones de euros con cargo la Ley de Crédito Extraordinario, que permitirá renovar 10.700 ordenadores de forma inmediata. Un plan que, además del suministro de material, introduce varias de las acciones iniciadas en este marco se centran en el diseño de programaciones didácticas, unidades de programación y materiales de aprendizaje vinculados al uso de nuevas tecnologías y en la formación del propio profesorado, sin olvidar los trabajos ya iniciados para dotar los Espacios Creativos o conectar todos los centros educativos de Canarias por banda ancha.

Una gestión, la de de este curso 2017-2018, con la que “pretendemos mejorar en prácticamente todas las áreas” -continuó la consejera-, con el Plan de Formación del Profesorado o el de Igualdad, que libera una hora del horario lectivo en los centros para la persona responsable planificar y realizar acciones de igualdad e introduce la figura de los agentes zonales de igualdad, que cuentan con 5 horas liberadas en un mismo día. Estos planes se complementan además con otros que ya se han avanzado en el consejo de Gobierno o se presentarán en los próximos meses.

Cifras

Al pasar a la exposición de los datos con los que se inicia el presente curso escolar, Soledad Monzón insistió en repetidas ocasiones en que en estos momentos se cuenta con datos muy provisionales, “que pueden tener cambios de importancia en pocas semanas”. De ahí su insistencia en que se traten como lo que son: una fotografía fija en un momento en el que ni las matrículas de todas las enseñanzas, ni el nombramiento de plantillas, ni la configuración de grupos está cerrada, “por lo que cualquier análisis que quiera hacerse en profundidad, tendrá errores de base”.

Una vez realizada esta aclaración, la consejera desgranó los datos provisionales:

A día 5 de septiembre, el momento de extraer los datos para poder ofrecer una idea de la situación a comienzo de curso, había 22.107 docentes nombrados, frente a los 21.461 del curso pasado. 

Especialmente significativo es el incremento de nombramientos en el cuerpo de maestros, a pesar del descenso en el número de alumnado. Al día de la fecha mencionada, se había nombrado a 10.244 docentes de este cuerpo, frente a los 10.038 del curso 2016-2017.

Por volumen de nombramientos, le sigue la Enseñanza Secundaria, donde también se incrementan los docentes. Para el curso que empieza el miércoles en esta etapa, se han nombrado a 9.183 docentes, cuando el curso pasado eran 8.719.

En las enseñanzas de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato, hay por el momento 219.148 matrículas para el próximo curso, frente a las 221.987 del curso pasado, lo que supone por el momento un descenso global de 2.852 matrículas.

Por niveles, en Infantil sigue la tendencia a la baja registrada en los últimos años, con 35.053 matrículas, frente a las 35.964 del curso pasado, es decir, 911 menos.

Más acusado es el descenso en Primaria, con 2.782 matrículas menos, pasando de las 90.666 del curso pasado a las 87.884 de éste.

En Secundaria, se mantiene el incremento de los últimos cursos, con 1.296 matrículas más. Este curso son 68.237, frente a las 66.941 del curso 2016-2017.

Mientras, en Bachillerato, la matrícula se sitúa hasta el momento en 27.751 estudiantes.
 
Como conclusión, Soledad Monzón indicó que, como consecuencia de estos datos, el dato general que se puede adelantar es que el curso comienza con 2.852 estudiantes menos y, a falta aún de numerosos nombramientos y un desglose más específico según el ámbito en que impartan las materias, se cuenta con 670 nombramientos más, en los cuerpos de maestros y educación secundaria. Así, “nuestra previsión es que el incremento de nombramientos se mantenga una vez contemos con datos definitivos, aunque es imposible cuantificar su cantidad en estos momentos, donde todavía no contamos con matriculaciones y distribución de grupos completa”. Finalmente, afirmó que “esto nos permitirá dar una mayor atención a la diversidad y continuar con la política de reducción de las ratios por aula, como hemos hecho en cursos anteriores”, antes de detallar los apartados específicos en los que se reducen estas ratios por norma. 

Se reduce el número máximo de alumnas y alumnos en los grupos mezcla de Infantil de 3 y 4 años, desde los 20, hasta los 18. En Infantil de 4 y 5, bajamos la ratio de 23 a 20 y, en los que unen 1º y 2º de Primaria, descendemos el máximo de 22 a 20 alumnas y alumnos.

También se establece un máximo de 12 estudiantes por grupo en la FP adaptada y en las escuelas unitarias baja el número para obtener dos grupos desde los 43, hasta los 38.

Por último, dentro de la estrategia de fomento del aprendizaje de las lenguas extranjeras, se reduce también el número de estudiantes por grupo en las Escuelas de Idiomas. De 45 a 40 en el nivel A2 y de 30 a 25 en el C1. También se establece un tope por grupo en el nivel máximo que se imparte que es el C2, con 20 alumnas y alumnos por aula.