Barrachina, ha definido al mindfulness, que en español se traduce como atención plena, como “una forma particular que tenemos de atender con todos los sentidos, tiene que ver con la calidad de la conciencia con la que vivimos nuestras vidas, es algo que sabemos hacer de manera natural y que se viene realizando desde hace miles de años”.

Miró Barrachina, quien también ha sido editora del primer número monográfico sobre mindfulness en psicoterapia de la Revista de Psicoterapia en 2006, el primer manual sobre las aplicaciones de mindfulness en la práctica clínica, ha puntualizado que “la atención plena no es moderna, no es nueva, forma parte de la herencia de la humanidad, no es algo comercial, lo hacen comercial, pero forma parte de nuestra herencia cultural”. 

En este sentido, la experta indicó que “todas las tradiciones de sabiduría de la antigüedad tienen alguna forma de practicar la atención, descubrieron que se podía cultivar y aprovechar, de manera que, los ideales de virtud, sabiduría, bienestar, mejora, etc., todas estas cosas se podían y se pueden alcanzar a través de la preparación de la propia mente, a través de la atención plena”. 

A modo de explicación, la autora detalló que “la atención plena es viable en la atención clínica, te permite darte cuenta que el sufrimiento, la mayor parte de las veces, es porque estás en el punto A cuando en realidad quieres estar en el punto B, si sientes esto, es decir, sientes que no quieres estar donde estás, entonces te encuentras en una situación de tensión respecto a lo que estás viviendo”. 

“Supongamos que el punto A es que estoy sintiendo ansiedad, pero yo no quiero sentir ansiedad, yo quiero sentir bienestar, que es el punto B, entonces resulta que todo el tiempo que estoy sintiendo ansiedad, mi mente está imaginando un estado que es completamente lo opuesto, es decir, el punto B. En este momento, estamos divididos entre donde estoy versus donde quiero estar, esa división significa que no quiero darme cuenta de que estoy sintiendo ansiedad, porque mi mente pide no sentir lo que siento, entonces la atención plena o el Minfulness sirve en este preciso momento para enseñarnos a canalizar y conocer lo que sentimos y poder disolver ese sufrimiento, ese estado en el que me encuentro, porque lo que tenemos que hacer es aprender a reconocerlo, a entenderlo para poder superarlo”, profundizó la psicóloga.

La experta subrayó que “la atención plena no significa ser conformistas, sino que sugiere aprender a entender cómo me estoy relacionando con la experiencia que estamos viviendo”. Seguidamente reconoció que “aprender a ver cómo te relacionas con tu experiencia no es algo fácil, pero tenemos que utilizar el potencial que tenemos internamente, para explorarlas, para entenderlas, para buscar soluciones”.