Carnaval
Los coches antiguos, como hacen más de medio siglo, recorren las céntricas calles del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife
El tiempo se tomó esta mañana una tregua y pudo celebrarse en todo su esplendor la 54.ª edición del Concurso de Coches Antiguos de Santa Cruz de Tenerife, que se ha realizado durante más de medio siglo de manera interrumpida el Domingo de Piñata de Carnaval, excepto en 2021, por la pandemia y en 2022 que pasó a celebrarse el 30 de mayo, Día de Canarias.

El gran Concurso de Coches Antiguos de Santa Cruz de Tenerife, con el tradicional recorrido por el centro de la ciudad, tuvo la salida a las 12 desde el parque García Sanabria hasta el Real Club Náutico, no sin antes quedar expuestos los vehículos cerca de la plaza de España. Finalmente fueron 32 los vehículos participantes, todos ellos matriculados antes de 1938, auténticas joyas del automovilismo mundial.

Muchísimas personas se dieron cita desde temprana hora para apreciar in situ las reliquias automovilísticas que van desde inicio de los años veinte hasta 1938, así como a los pilotos como los pasajeros vestidos de la época -años 20 y 30- cuando en Tenerife la importación de vehículos de Estados Unidos, por un particular arancel, permitió motorizar a los tinerfeños antes incluso de que la Isla estuviera conectada por carreteras. No de extrañar, por tanto, que las marcas con más representación fueran Ford, Cadillac y Chevrolet.

La previa a la salida estuvo amenizada por el grupo Los Bailarines del Swing, que pusieron color y calor con su vestimenta singular, música y baile del Charleston a una mañana que nos trasladó a los años veinte.

Abel Febles, presidente del Club de Automóviles Antiguos de Tenerife, destacó este año, aparte de un Willis 77 Coupe de matrícula marroquí, "la participación de dos Fiat 501 Torpedo, matrículas TF-613 y TF-633 del año 1922", los dos vehículos más antiguos de cuantos participaron hoy.

Tras darse la salida en el parque, los vehículos rodaron por la rambla de Santa Cruz para bajar por la calle Ramón y Cajal -se cambió San Sebastián al jugar el CD Tenerife a la una de la tarde- hasta la plaza Weyler, Méndez Núñez y el Reloj de las Flores, bajar por la calle El Pilar, Villalba Hervás y La Marina hasta la avenida Francisco La Roche, donde quedaron expuestos los coches cerca de una hora.

Luego continuaron hasta el Real Club Náutico, donde se procedió a la entrega de distinciones en el transcurso de un almuerzo, entre ellos al presidente del club anfitrión, Andrés Orozco, así como al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, recogido por la concejala Ana Belén Mesa y a la Policía Local, que este año ha hecho un trabajo excepcional, placa que fue entregada en la exposición realizada en la avenida Francisco La Roche.

También hubo placas para el Club de Automóviles Antiguos del Norte, recogida por Silvestre Fariña, que siempre colaboran en este evento, con buena parte de las monturas llegadas del valle de La Orotava y la Isla Baja. Algunos de esos coches también estarán el próximo domingo en la Piñata de Tacoronte.