El consejero Popular Valentín González Évora manifiesta su rechazo “a la vaguedad con la que fuimos contestados por el consejero responsable del área en el Cabildo, ante una pregunta del Partido Popular durante el último Pleno, en la que nuestro grupo pedía explicaciones sobre las acciones, importes, cronograma y modelo que la institución insular tiene previsto para aprobar el nuevo y necesario convenio con el Ayuntamiento de Arico, por la ubicación del Complejo Ambiental de Tenerife en su término municipal”.

“De hecho- denuncia González Évora- desde el gobierno insular se limitaron a responsabilizar de esta falta de actualización del convenio a aspectos técnicos”, cuestión que para el consejero Popular resulta “inaceptable, si tenemos en cuenta que la ubicación del Complejo Ambiental condiciona de forma absoluta el desarrollo económico del municipio de Arico, a lo que hay que sumar las consecuencias económicas de la pandemia del coronavirus, además de las del terrible incendio que asoló las zonas altas del municipio el pasado mes de mayo”.

Para el consejero Popular, “la actitud del gobierno insular al respecto de este tema vuelve a poner de manifiesto la categórica falta de liderazgo que tiene este Cabildo, que no es capaz de planificar, diseñar y ejecutar una hoja de ruta para dar respuesta a las necesidades de los tinerfeños”. En este sentido, González Évora incide en que “la renovación de este convenio podría ser una oportunidad para Pedro Martín de demostrar un auténtico compromiso con el municipalismo, en lugar de mirar para otro lado, como está haciendo en esta ocasión, y culpar a aspectos técnicos de una cuestión que tiene un claro componente de voluntad política”.

Hasta el momento, el Cabildo compensa con 700.000 euros al año al Ayuntamiento de Arico, pero lo cierto es que “esta cantidad no es suficiente para abordar las necesidades que padecen los ariqueros, especialmente en el contexto económico actual”.

El convenio de compensación para el Ayuntamiento de Arico por la ubicación del Complejo Ambiental en su término municipal data de 1983, cuando se aprobó el Plan Insular de Residuos Sólidos de la Isla de Tenerife, estableciendo Arico como único vertedero, y dando lugar a la formalización de un convenio de colaboración para el municipio en 2001. 

En 2018, el convenio expiró, por lo que desde el propio Ayuntamiento se solicita al Cabildo que se actualicen las cantidades destinadas al mismo, además de “añadir al nuevo acuerdo la necesidad de invertir en ámbitos como servicios sociales, movilidad o rebajas en la factura de la basura”.