La campaña de Arona contra vertidos incontrolados se pasa por alto restos de tuberías de amianto en Los Cristianos
Vecinos del pueblo turístico y residencial de Los Cristianos han alertado a Sol del Sur de la existencia de un vertido clandestino de material de obra “que, además de poner de manifiesto un claro ejemplo de falta de civismo ciudadano, prueba la falta de agilidad de las administraciones públicas y de los cuerpos de seguridad a la hora de actuar contra las amenazas que comprometen la salud pública de la población y la protección del medio ambiente”.
Como se puede apreciar en las fotos, entre el material de obra vertido de manera irregular en los márgenes de la Avenida Amsterdam, en las inmediaciones del Monumento Natural Montaña de Guaza, abundan restos de tuberías antiguas de fibrocemento fabricadas con amianto.
Los citados vecinos critican que desde el gobierno municipal del Ayuntamiento de Arona informaron hace unos días vía comunicado de prensa de una campaña de concienciación, detección y limpieza que se había saldado con 225 acciones de retirada de vertidos incontrolados de escombros y materiales de obra, en lugares no autorizados, así como de detección de depósito de basuras fuera de horario.
“Pero se ve que esa campaña consistorial omite vertidos de escombros como el mencionado en Los Cristianos a pesar de que el mismo compromete no solo el paisaje y la estética urbana y de un espacio natural protegido –reprochan– , sino incluso la salud de la población por la peligrosidad del amianto que parece contener”.
Añaden que por la calle en la que están esos escombros pasa personal de varios servicios municipales, como el de recogida de basura o la Policía Local, motivo por el que les resulta llamativo “que se lleve a cabo una campaña de identificación y recogida de vertidos incontrolados, y se les pase por alto uno tan fácil de detectar”.
En su opinión, el consistorio aronero “debería mejorar su labor de localización y retirada de vertederos incontrolados” como el que tienen delante de sus viviendas, además de “fijar líneas de colaboración ciudadana para que sepamos dónde o a quién llamar o escribir para dar parte de este tipo de vertidos”.
También estiman que en el caso del amianto, el Ayuntamiento “debería jugar un papel mucho más activo para concienciar sobre la peligrosidad de ese material cancerígeno y para agilizar su retirada en cuanto se produce algún vertido incontrolado de ese material en espacios públicos”.
Amianto, una asignatura pendiente.
La inactividad o ineficacia de las administraciones municipales sureñas para actuar cuando se detecta amianto, ha quedado de manifiesto en otras ocasiones como, por ejemplo, durante 2018 en Callao Salvaje (Adeje).
El Cabildo de Tenerife aprobó en 2018 varias medidas para impulsar la detección y retirada de ese material tóxico de manera coordinada con los ayuntamientos y la ciudadanía, entre ellas la elaboración de un mapa insular de amianto, pero esos acuerdos no se han puesto en práctica. En ese objetivo lleva ventaja Gran Canaria, cuyo Cabildo sí puso en marcha acciones para detectar y eliminar el amianto de la isla y donde algunos ayuntamientos como los de Telde o Mogán han desarrollado acciones en ese sentido.
