Al acto conmemorativo, celebrado en la sede insular, acudieron representantes de todos los grupos políticos con representación en el Cabildo así como del colectivo de personas con hemofilia, y de otras instituciones colaboradoras de la asociación.

Marián Franquet destacó la trayectoria de esta asociación con la que el Cabildo lleva casi 20 años colaborando para ofrecer un servicio integral que mejore  la calidad de vida de las personas con hemofilia y que fue, además, una de las primeras asociaciones en sumarse, en 2014, al Anillo Insular de Políticas Sociales.

Según explicó, “AHETE define perfectamente lo que significa el Anillo Insular de Políticas Sociales” al permitir descentralizar y acercar los servicios a todas las personas con hemofilia y a sus familiares y allegados. “Que tengan recursos tanto en el norte, como en el sur y en el área metropolitana, hace que la acción social se acerque a donde está la necesidad y  llegue a las personas que más lo necesitan, y no al revés”, añadió.

Por su parte,  Tomás Díaz, destacó “el apoyo del  Cabildo de Tenerife, que siempre ha estado ahí, y el trabajo y esfuerzo tanto de los trabajadores y trabajadoras de la asociación como de las familias” que hicieron posible la asociación. “Hace 30 años la hemofilia era un gran desconocido. Mi madre fue una de las primeras personas que empezó a luchar por esta asociación cuando no tenía ni nombre. Hoy, lejos de los premios, lo más importante para AHETE es estar siempre al lado de las personas con hemofilia y que siempre se sientan arropadas por nosotros”, aseguró. 

En la actualidad, AHETE atiende a más de 85 personas diagnosticadas, además de portadoras y familiares englobando a más de 250 personas. La profesionalización de la asociación llegó en el año 2002, cuando se contrató a dos trabajadoras sociales para dar un servicio específico y continuado a personas con la patología y familias.

En los últimos dos años el Cabildo de Tenerife ha doblado el apoyo económico que presta a la Asociación, en el marco del Anillo Insular de Políticas Sociales, con una  dotación anual de 40.000 euros frente a los 20.000 concedidos en 2019. A día de hoy, esta colaboración se canaliza a través del proyecto Atendiendo una nueva realidad, un  programa con el que se busca facilitar la inserción laboral de las personas afectadas por esta enfermedad, un trastorno congénito de la coagulación.

Esta asociación presta una atención específica a las personas con coagulopatías y sus familias, a través de una metodología integral y trasversal que engloba la prevención y mejoras en su salud física hasta el bienestar emocional, que se deriva de sentirse apoyado por profesionales y por el resto de familias, facilitarles herramientas que los empoderen para el manejo de las TICs, la Búsqueda de Empleo o sensibilizar a la sociedad sobre esta enfermedad rara y cuáles son las repercusiones de la vida diaria de estas personas y sus familias.