El jurado, integrado por 160 jóvenes lectores de 25 centros educativos de toda la isla, falló el galardón de literatura juvenil tras un encuentro los tres autores finalistas de este certamen, que celebra su sexta edición.

El Premio Azagal es un proyecto de formación de personas lectoras y promoción del hábito lector dirigido a la población joven de educación secundaria. Este galardón se creó dentro de los programas de fomento de las lecturas (PIALTE) que lleva a cabo el Cabildo de Tenerife.  Azagal es el seudónimo de Juan Manuel Trujillo Torres (Santa Cruz de Tenerife, 1907 − Las Palmas de Gran Canaria, 1976), ensayista, editor e impresor canario, impulsor excepcional de la cultura canaria entre la etapa de las vanguardias históricas y el periodo de posguerra.

La consejera de Educación y Juventud, Concepción Rivero explica que “ayer, martes, se  dieron cita en el TEA los componentes de los 25 grupos, 160 estudiantes y 20 docentes, con los tres escritores finalistas del Premio Azagal, Rosa Huerta, con La hija del Escritor;  Gabriel Sánchez García Pardo, por El aprendiz silencioso; y Daniel Hernández Chambers que resultó ganador con la obra Departamento de Asuntos Mágicos.

A través de este proyecto el alumnado. Tras leer las obras los estudiantes participan en un encuentro con los tres autores de las obras, con quienes intercambian impresiones y emiten un voto para elegir la obra a la que quiere que se conceda el galardón.

El Grupo Promotor Azagal se compone de quince personas entre jóvenes que han participado en los Comités de Lectura, tres en la actualidad y adultos relacionados con la lectura juvenil  como escritores, editores, docentes o por ejemplo educadores.

La directora insular de Educación y Juventud, Isabel Bello,  destaca “la gran acogida y  participación activa de los jóvenes involucrados en este proyecto de fomento de la lectura, estudiantes que  realizan importantes reflexiones, demuestran una gran capacidad de visión crítica y de análisis”.

Los objetivos del Premio Azagal y las actividades vinculadas son, principalmente, formar a jóvenes lectores con sentido crítico y dar herramientas los nuevos escritores y darles voz haciéndoles jurado de un premio literario, generar espacios de debate y reflexión en los que los jóvenes puedan compartir sus ideas sobre narrativa, escritura, literatura y valores y propiciar un espacio donde los jóvenes escritores puedan mostrar sus textos.