La consejera insular de Museos, Amaya Conde, ha condenado estos hechos y ha manifestado su indignación con este ataque, al que ha calificado como “vandálico y no reivindicativo. Hecho, además, por delincuentes”. Asegura, también, “que va a costar mucho tiempo y dinero de todos la ciudadanía limpiar la piedra original del inmueble. Las reivindicaciones siempre deben ser por medios pacíficos, lo que no significa perder fuerza o valor, en cambio actos delictivos lo único que consiguen es desprestigiar un movimiento reconocido por su defensa de los derechos humanos y por la igualdad”.
Por todo ello condena “todo acto que implique el deterioro de un Bien de Interés Cultural y patrimonio de toda la isla”