Historias de la vida real en el trasporte público de Tenerife
En la reunión del PEBT, el Partido de Expertos de Bares y Terrazas, hemos compartido pequeñas historias, frases o anécdotas que ocurren con pasajeros y conductores de Titsa, la empresa de transporte público en Tenerife.

La calle es un mundo fantástico e inimaginable, especialmente para aquellas personas que están atrapadas en círculos viciosos, sin entrar en detalles. Sin más preámbulos, compartimos las anécdotas más interesantes:
1. Un conductor confiesa que el 90 % de los pasajeros viajan gratis. En la línea 467, que va de Ten-Bel a La Caleta o viceversa, suelen viajar aproximadamente ciento treinta personas apretadas, y es triste dejar a muchos en las paradas.
2. Las conductoras son un encanto, especialmente dos de ellas que son verdaderas guerreras. Cuando algún maleducado no cede su asiento a las personas mayores o con discapacidad, paran la guagua y, con un toque de atención, los obligan a ceder el asiento. Si no les hacen caso, son capaces de darles un empujón y bajarles del autobús.
3. El martes 28 de enero, cerraron la carretera que sube desde la rotonda de la fuente de Los Cristianos hacia la Escuela Oficial de Idiomas por una avería en una tubería, y se armó el jaleo. Durante aproximadamente veinte minutos, algunos pasajeros le amargaron la vida al policía local que estaba en la zona, aunque nosotros nos reímos preguntando: “¿Qué culpa tiene el pobre policía?”.
4. Deberían cobrar al menos un euro por trayecto; así podríamos exigir un mejor servicio público.
5. Un inspector de Titsa intentó hablar con un pasajero magrebí que se coló por la puerta trasera mientras otros bajaban. El magrebí le sacó una pequeña navaja, pero se topó con un inspector decidido, quien le dio un castañetazo en la oreja; seguramente ese pasajero aún tiene un pitido en la cabeza.
6. Un "busca vidas" italiano también se coló por la parte trasera, y el conductor tuvo que acercarse hasta donde estaba sentado para hacerle un reclamo.
7. Debería ser transporte gratuito para los estudiantes en época de estudios y siempre gratuito para los jubilados.
8. Un conductor nos confesó que un policía local multó a todos los coches de los conductores de Titsa que estaban estacionados sobre la acera donde se encuentran todas las guaguas en el Parque de la Reina, a pesar de que por allí no pasa absolutamente nadie.
9. Existen pasajeros que no tienen vergüenza, que llegan los últimos a las paradas y se cuelan de maneras increíbles; si les dices algo, suelen insultarte.
10. Los mejores conductores son aquellos que ponen música a todo volumen durante los trayectos.
11. En la parada principal de Los Cristianos, un indigente lleva mucho tiempo ocupando los asientos de una de las paradas.
Hasta aquí llegamos, esperando seguir compartiendo algunas anécdotas interesantes de pasajeros y conductores de Titsa, recordando que la dirección no comparte las opiniones expresadas con palabras mal sonantes.