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martes, 11 de febrero de 2025 21:12h.

Deportes

El 'Elefante Rosa' de Rafael Lesmes llega al ecuador de la segunda etapa del Dakar a pesar de tener un amortiguador suelto

El equipo canario del Dakar por la Vida completar el recorrido de la segunda etapa hasta el campamento base donde harán noche a la espera de que se reanude mañana la etapa de 48 horas cronometrada con inicio y final en Bisha, tras contar con 90 minutos de taller para intentar solventar la avería de un amortiguador suelto.

El equipo canario podrá reanudar mañana la segunda etapa
El equipo canario podrá reanudar mañana la segunda etapa

El Elefante Rosa ha llegado al campamento base sin incidentes graves en una etapa, la segunda del Dakar Classic, que ha venido marcada por su gran dureza, donde tomarán un pequeño respiro antes de emprender la marcha en la que será la segunda parte de la etapa de 48 horas cronometrada.

90 minutos tan solo son los que ha tenido el mecánico del equipo, Alberto Casanoba, con el apoyo de los mecánicos de TH-Trucks, para intentar arreglar el amortiguador suelto con el que han tenido que cubrir los últimos 200 kilómetros del enlace hasta llegar a su destino. Transcurrido ese tiempo el camión entrará en la zona conocida como parque cerrado, donde no podrá ser tocado hasta la salida. El principal problema es que en caso de sufrir una avería de importancia, no se podrá reparar durante 48 horas.

"El tornillo interior del amortiguador se soltó, aunque afortunadamente no lo perdimos y al ser una etapa endurance, contamos solo con una hora y media de taller para intentar solventarlo, pero seguro que en ese tiempo lo vamos a poder reparar y llevaremos el camión al parque cerrado donde dormirá", explica Rafa Lesmes desde el campamento base.

El piloto canario catalogó la etapa como "larga, de 674 kilómetros, con casi 200 de entrada de enlace y ahora unos 150 kilómetros, el resto son unos 350 kilómetros de sector selectivo".

En cuanto a la complicación de la etapa viene marcada en su opinión "por los continuos cambios de ritmo y de tipos de suelo, con mucha piedra, ríos secos y en definitiva todo lo que uno espera encontrarse en este tipo de carreras y más en el Dakar que es tan dura y tan extrema". "Entiendo que las cosas las hemos hecho bien, nos hemos perdido un par de veces por el camino, pero íbamos bien de tiempo, en más de una ocasión hemos estado a punto de chocar contra alguna acacia o alguna piedra, pero este va a ser el pan de cada día y mientras no pasen cosas serias uno lo toma con humor y sigue adelante, porque lo más importante es que la etapa está terminada, estamos los tres bien, el camión también más allá del amortiguador que está en vías de solución", explica Lesmes.