');
Buscar
viernes, 29 de marzo de 2024 00:49h.

FEPECO avisa que las PYMES de la construcción están al borde de la quiebra

Oscar Izquierdo presidente de FEPECO avisa que la viabilidad de los fondos Next Generation y de las inversiones contenidas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea están amenazados. Algo muy preocupante, ya que se trata de proyectos llamados a transformar y reconstruir Canarias.

Oscar Izquierdo 011-2(1)
Las licitaciones deberían tener ya los precios actualizados y establecer un sistema de reequilibrio económico estable en el tiempo

El dinero no está llegando a su destino, es decir, a las empresas, que son las encargadas de ejecutar los proyectos. La falta de iniciativas y de mecanismos para canalizar las partidas provoca que el dinero no llegue a entidades locales, corporaciones, empresas.  En el caso concreto de la construcción, desde FEPECO y con la Confederación Nacional de la Construcción, a la cual pertenecemos, instamos al Gobierno de España a aprobar cuanto antes un nuevo Real Decreto Ley de revisión de precios más ambicioso y libre de condicionantes, que no discrimine a la práctica totalidad de las obras e incorpore los precios descontrolados de la energía y otros materiales para detener la sangría de licitaciones desiertas. 

En el último año, 2.000 licitaciones públicas en toda España se han quedado sin empresas que acudan. Un agujero de 900 millones que amenaza la viabilidad de los fondos europeos, ya que se están quedando en el aire contratos de hospitales, depuradoras, desaladoras o redes de transporte, entre otras inversiones llamadas a transformar la economía de Canarias y del país. Y todo eso, a pesar de tres Reales Decretos-ley de revisión de precios que no se aplican a nueve de cada diez obras debido al sinfín de condicionantes. Necesitamos una ley más ambiciosa, que compense especialmente a las pequeñas y medianas empresas, las PYMES. En Canarias, se han quedado desiertas unas 200 licitaciones, por valor de unos 72 millones de euros en el último año y medio avisa.

Dada la situación absolutamente imprevisible y que desborda cualquier previsión razonable de la evolución de las materias primas y la demora que ello está acarreando en los plazos de suministro de materiales que venimos arrastrando y con el fin de adoptar medidas proactivas que permitan el mantenimiento de la actividad de las empresas canarias y de sus trabajadores, desde FEPECO solicitamos que se adopten las medidas oportunas para que todos los órganos de contratación de las distintas administraciones, sean sensibles con esta difícil situación de incertidumbre constante.

La Legislación debe permitir el eventual restablecimiento del equilibro económico de los contratos públicos, por la aparición de un riesgo anormal e imprevisible, de tal manera que los órganos de contratación puedan reconocer el derecho del contratista a percibir una indemnización o compensación por los daños y perjuicios efectivamente producidos, como consecuencia directa e inmediata del imprevisible aumento del precio de las materias primas y del retraso anormal en el suministro de materiales que estamos viviendo en la actualidad. 

Así evitaremos el riesgo de que las empresas opten por no presentar ofertas a los contratos públicos que se licitan, como está ocurriendo, o que, como también advertimos, los contratos públicos se adjudiquen a empresas foráneas que hacen bajas inasumibles para adjudicarse los contratos a pesar de las altas probabilidades de no poder cumplir con las calidades exigidas, tiempos y terminación de obras

Son las pequeñas y medianas empresas las más afectadas, porque los Reales Decretos leyes de revisión extraordinaria de precios sí que están consiguiendo salvar el contexto para grandes proyectos de infraestructuras viarias y ferroviarias, pero se están mostrando insuficientes para los trabajos de menores dimensiones licitados por administraciones locales, ayuntamientos o cabildos y Comunidades Autónomas. 

Toda licitación debería tener ya los precios actualizados y establecer un sistema de reequilibrio económico estable en el tiempo, como estuvo desde 1955 hasta la ley de desindexación de 2015. La razón de ello es que alrededor del 95% de las obras no está teniendo revisión de precios, y los sobrecostes de las obras están superando de media el 40%, por lo que las PYMES canarias están soportando íntegramente la escalada de precios de las materias primas en los contratos públicos. Una situación que las pone al peligro de la propia supervivencia.