La votación en el Comité Federal del PSOE sobre la propuesta de Pedro Sánchez de celebrar primarias el 23 de octubre y un congreso en noviembre se ha celebrado a mano alzada y el que fuera secretario general del partido deja el puesto tras rechazarse la propuesta de manera rotunda. Ahora, presumiblemente, el partido quedará en manos de una gestora independiente, que decidirá qué hacer con el futuro del PSOE, con la más que probable abstención a un gobierno del PP.

Los críticos rechazaron que la votación sea secreta. A la vez que decidieron presentar firmas para una moción de censura a Pedro Sánchez tras recogerlas entre los delegados del Comité Federal con el fin de forzar su cese.

La decisión se adoptó en protesta por la decisión de la Ejecutiva en funciones de votar en urna la propuesta de Pedro Sánchez de celebrar primarias el 23 de octubre y un congreso en noviembre.

La votación ha quedado suspendida entre acusaciones de “pucherazo” y “fraude”al negarse los representantes del sector crítico a participar en ella.

Como reacción, los detractores han tomado la iniciativa de recoger firmas para presentar una moción de censura al secretario general interino.

El artículo 7 del reglamento del máximo órgano señala que se puede promover una moción de censura que esté “apoyada al menos por el 20 por 100 de sus miembros y sancionada para tener efectos por la mayoría absoluta de los y las integrantes del Comité Federal”.