Los paros podrían afectar de manera significativa a las exportaciones que realiza la isla a Marruecos, Cabo Verde y Senegal, entre otras regiones africanas. Además, prestan sus servicios a la mayoría de las industrias afincadas en Canarias, lo que podría generar desabastecimientos y problemas para la distribución de yogures y otros productos procesados si la huelga se prolonga de forma indefinida.

Esta empresa es esencial en el buen funcionamiento del mercado agrícola en la Isla, por lo que agricultores y ganaderos se verán también gravemente afectados, sobre todo los productores de plátanos y tomates. Los convocantes de los paros comparecerán en rueda de prensa el próximo miércoles, 27 de diciembre, a las 10:00 horas, para explicar los motivos que los han llevado a convocar esta huelga y el calendario de paros que barajan para 2017 y 2018.