Efectivos del Grupo de Atención al Ciudadano de la Comisaría Sur de Tenerife detuvieron a un hombre originario de Marruecos por la receptación de un elevado número de teléfonos móviles.

El arresto se produjo en las inmediaciones de la popular zona de ocio de Las Verónicas, donde el detenido fue sorprendido en su vehículo con veinte terminales móviles de la marca Apple, muchos de los cuales habían sido robados durante el fin de semana carnavalero.

Los agentes observaron que los teléfonos estaban envueltos en papel de aluminio, una técnica utilizada para eludir el rastreo por parte de los legítimos propietarios o las autoridades. Este método, conocido como "efecto de la jaula de Faraday", desconecta los dispositivos de las redes de comunicación, dificultando su localización.

La policía ha confirmado que existen numerosas denuncias relacionadas con el robo de estos dispositivos, cuyas víctimas han sido identificadas y recibirán sus pertenencias tras realizar las gestiones necesarias.

Este tipo de delitos son comunes en zonas turísticas, donde se llevan a cabo múltiples operaciones policiales a lo largo del año para combatir el hurto de móviles. Los terminales robados suelen ser destinados al mercado negro, donde se venden en tiendas de compra-venta o en redes sociales como artículos de segunda mano, o incluso exportados a otros países, incluyendo Rumania y Marruecos.

Las autoridades continúan trabajando para desarticular estas redes delictivas y devolver los teléfonos móviles a sus legítimos propietarios.