Ante la inminente llegada de fuertes vientos del oeste y suroeste, que se espera alcancen rachas de hasta 130 km/h en zonas específicas, la actividad escolar en las mencionadas islas se trasladará a un formato no presencial. La medida se ha tomado en coordinación con la Dirección General de Emergencias, que ha emitido una alerta por el impacto que el viento y el oleaje tendrán en la seguridad de la población.

Se prevé que la velocidad media del viento oscile entre 40 y 70 km/h, con zonas donde se podrían superar los 110 km/h, especialmente en las áreas montañosas de La Palma y Tenerife. Por esta razón, se recomienda a los estudiantes y sus familias permanecer informados sobre el desarrollo de la situación y tomar las debidas precauciones.

El personal docente podrá llevar a cabo sus actividades desde casa, siempre y cuando disponga de los recursos necesarios para ello. En aquellos casos en que no se pueda implementar la modalidad no presencial adecuadamente, se suspenderá la actividad lectiva. Las autoridades educativas pidieron la colaboración de la comunidad educativa para adaptarse a estas circunstancias excepcionales y garantizar la continuidad del aprendizaje.

Se recuerda a la población la importancia de mantenerse al tanto de las actualizaciones meteorológicas y seguir las recomendaciones de los servicios de emergencia para asegurar su seguridad.