Piedras sobre nuestro tejado
Esta semana la arrancamos con el siguiente titular: ‘Los turistas están detrás de una de cada tres infracciones en espacios protegidos’. Lo primero que pensé, como seguramente muchas personas, es que las otras dos infracciones las provocan entonces los residentes, que se supone que somos los primeros interesados en cuidar nuestro territorio. Pero claro, culparnos a quienes residimos en Canarias, que votamos, no queda bien en boca de nuestros dirigentes públicos, que ahora parecen preocupados por el descontento social tras décadas de inacción en Tenerife, una isla que sobrepasa la obsolescencia y la saturación en muchas de sus infraestructuras, que tiene un déficit enorme de vivienda, que cuenta con sus principales vías de comunicación colapsadas, que permite que el 40% de la canalización del agua se desperdicie por unas viejas infraestructuras, que tiene un transporte público deficitario… pero no, la culpa es del turista.