Creo que nos entraría un miedo en el cuerpo inexplicable incluso para las personas que desgraciadamente ya han sufrido esta mala experiencia, porque verse en medio de un desastre natural nos demuestran que no somos nadie, por más dinero que tengas ni por más positivo que seamos.

El volcán de La Palma por ejemplo nos demostró que a la raza humana en esos momentos, podríamos compararla con un grupo de hormigas que están caminando felizmente y les cae encima un cubo de agua hirviendo. Recuerdo estar en Tijarafe, un municipio de La Palma situado a unos treinta kilómetros del volcán y sentía moverse la tierra mientras escuchaba el horrible sonido de los escupitajos de lava. Era una emoción que no hacía gracia ninguna, porque sentías aquel silencio entre los presentes y además estuve sacando montón de palanganas de ceniza de una azotea, una azotea de la casa situada aproximadamente a treinta kilómetros.

 

Algo que hizo "reír de tristeza", fue ver a una familia tendiendo la ropa por la noche, porque no eran conscientes de que por la mañana estarían las sábanas negras con las cenizas del volcán. Pero los animales de la raza humana, somos los más dañinos del planeta Tierra, porque si no padecemos de un terremoto, volcanes o inundaciones, nos inventamos cualquier guerra o nos hacemos daños con nuestras mentiras y nuestras desdichas, pero es por naturaleza, ya que muchísimos errores que cometemos, lo hacemos por eso mismo, porque somos así de gilipollas y después nos arrepentimos de cualquier forma.

"Ditosadios que noganaunopadisgustos". Perdone las molestias y gracias por la atención prestada.