Vecinos de El Fraile exigen explicaciones a la Alcaldesa de Arona por la tala de árboles para construir una cancha de baloncesto.

Los residentes consideran que existen alternativas más adecuadas para este proyecto, señalando un terreno en la calle Taburiente que, según afirman, se ha convertido en un basurero de excrementos caninos.

Datos proporcionados por los vecinos sugieren que, cada día, alrededor de veinte perros defecan en esta área, lo que resultaría en aproximadamente 1,200 excrementos mensuales, es decir, cerca de 14,200 al año. Este problema, que ha persistido por más de diez años, ha suscitado la preocupación de los habitantes, quienes consideran que este espacio podría ser más apropiado para la construcción de la cancha.

Un exconcejal del Ayuntamiento supuestamente afirmó a un vecino que la tala de árboles se realizó con el propósito de hacer la cancha, aunque se ha evitado dar más detalles hasta que la Alcaldesa ofrezca una explicación oficial sobre el proyecto.

Durante el proceso de tala, los vecinos interrogaron a los operarios, quienes expresaron que solo cumplían con su labor.

Ante la falta de información y transparencia en torno a la obra, los vecinos han comenzado a recopilar firmas para exigir la paralización del proyecto. La comunidad demanda claridad sobre los permisos y la planificación del proyecto, así como un diálogo abierto que permita abordar sus preocupaciones de manera constructiva.