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jueves, 28 de marzo de 2024 13:22h.

El valor, se nos supone

Eso de que todavía nos creamos, de que somos uno de los Países privilegiados de Europa huele a triunfalismo barato. Aunque, por un lado, parece que es verdad, ya que se nos tiene por ser un paciente digno de estar en el mejor sofá de un Psicólogo, pensamos que puede ser por nuestra forma de vida que no conocemos la censura en practicar la buena vida tanto en la mesa, en la siesta, en que lo llevemos todo al mismo tiempo haciendo varias cosas a la vez sin ver los resultados, a nuestra sonrisa y risa que siempre tenemos en nuestro semblante, tan lejos de esas caras taciturnas y avinagradas de nuestros socios europeos de la UE. ¿Será verdad?, apostamos a que si, la luz solar que tenemos da otro estilo de vida al español. Pero amigo en la política, también somos algo muy serio a tratar.

En tantos apartados que tenemos demostramos que somos diferentes a los demás europeos, hoy y en esta época que estamos viviendo, nunca al español se le ha tenido así, siempre nos han tratado como de quijotes, y por pensar así nos las han dado todas en el mismo sitio.

Según encuestas hechas y haciéndose eco en las redes sociales, se ha visto el resultado de que si nos atacaran otros países o nos ocuparan, el 60% lo acataría sin pestañear, no harían nada al respecto, y si fuera Marruecos quien ocupará Melilla y Ceuta lo aplaudirán
¡Increíble!, igual esto es el espíritu de progresismo, o la anarquía incipiente de unos cuantos descerebrados, o esa vida placentera que conlleva el turismo en donde nadie conoce a nadie ni hace nada por nadie.

Todo esto que tenemos viene de entrada y con un crescendo lento pero seguro al albergar España dentro de nuestro territorio a 17 Gobiernos muchos de ellos llamados países, y los demás (de momento) son autonomías aunque para unos pocos les gustaría llamarse Federados. Todos estos tienen su propia doctrina y se vanaglorian de saber llevar su autonomía, dependiendo del color político que las gobierne, lo que sea será todo bien venido, antes de tener ese acatamiento ciego al poder central, eso ha quedado de mode, out, fuera de toda lógica política que actualmente tienen estas autonomías.

Así que no es de extrañar que veamos esas rencillas barriobajeras entre políticos de nuestros diferentes "países interiores nacionales", que llevan una guerra sorda entre ellos, nadie quiere torcer el brazo, desde que se nos ha impuesto esta política torticera, rampante, embustera, bananera y de poco aprecio nacional e internacional, el poder Central es una quimera.

Así que demasiado bien vivimos, con ese confusionismo pleno que tenemos, y eso es lo
que no entienden los "socios vecinos'', que el inversionista que presenta proyectos y se lo pasan a cinco años vista, es para hacérselo ver. Estamos dando vueltas en un carrusel que por no saber no sabe ni donde ni cuando va a parar.