Que algo tendremos que hacer, pasar salir de este "atontamiento" tan cateto y de este pasotismo sin parangón que tenemos, es de desear. Se sabe que las comparaciones son odiosas, pero es que a la fuerza ahorcan, y es cuando uno ve por esas tierras tan nuestras como de ellos, o sea España,  pero que en este Gobierno, (y en muchos diría yo) no han acabado de valorar estas islas que solo sirven para que las digan estos vende mantas, "Afortunadas", esta fortuna es sin duda dada por la divina providencia, porque si llega a ser por todos aquellos que siguen poniendo al Archipiélago como de Afortunado, es para  llorar sin lágrimas.