Tras 49 días de confinamiento domiciliario, ayer, por fin, pudieron salir a la calle y a las zonas públicas todas las personas que lo desearan, bien para pasear o bien para hacer deporte. Sin embargo, como se veía venir, en los deportes acuáticos reinó la confusión en torno a lo que se puede hacer o no: en municipios como Granadilla se practicaron deportes como el surf o el kitesurf sin problema, en otros como Adeje permanecieron cerradas todas las playas, en Arona fue expulsado del agua un nutrido grupo de surfistas y en Güímar otro, aunque en este caso el Ayuntamiento pidió disculpas y les animó a volver al agua. 

La mayoría de ayuntamientos del Sur de Tenerife tenían claro hasta bien entrada la tarde de ayer que el acceso al mar estaría vetado para toda la población sin excepciones durante varias semanas más. Algunos como el de Granadilla de Abona lo explicaron incluso a través del bando que emitieron para clarificar qué se puede hacer y qué no a partir de hoy, con la entrada en vigor de las medidas de alivio del estado de alarma. Pero todo cambió al anochecer y policías como los del término granadillero pasaron a informar que desde hoy, 2 de mayo, se podrán practicar surf, windsurf y demás deportes acuáticos en su litoral.