Opinión
“Marrullería”, por Roberto Gil Hernández
Durante el pleno del Cabildo de Tenerife correspondiente al mes de enero, se aprobó una moción con el apoyo de todos los grupos políticos presentes que pedía la inclusión del yacimiento arqueológico grancanario de Risco Caído en las listas de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Un gesto, que además de favorecer la visibilización de este importante enclave precolonial, también sirvió para lograr el acuerdo entre instituciones acostumbradas a una coexistencia signada por el más obstinado de los insularismos.