Hay que destacar la transcendencia del sector de la construcción en nuestra Comunidad Autónoma, puede entenderse como un argumento reiterativo y sin embrago, resulta casi forzoso, dado que no se ha acabado de percibir su función tan vital. Efectivamente, construir es adaptar la naturaleza física a las necesidades básicas de las personas y de la sociedad. Humaniza la geografía, al disponerla a un mejor servicio a sus residentes. Se construye para aumentar la calidad de vida y el bienestar social, siendo una actividad imprescindible para el desarrollo de las más variadas relaciones, desde las primarias, a través de la vivienda, a las de más contenido social como centros docentes o sanitarios.