Para lo bueno, porque siempre hay cuestiones a celebrar, cosas bien hechas, acontecimientos irrepetibles, vencimientos, especialmente personales, también, en las distintas esferas vivenciales, como en el entorno profesional. Sin duda, llegados los últimos días, siempre hay que darle gracias a Dios, por haberlos vividos, disfrutándolos.  También, de alguna manera, tomando esta expresión del mundo del cine, nos hemos enfrentado al lado oscuro, a lo escabroso, malo, a las contrariedades, más frecuentes de lo que cada uno quisiera, incluso algunas muy amargas, es claramente lo que podemos denominar con total acierto, la pelea por la supervivencia. 

Hace tiempo que lo sabemos, que se habla en todos los corrillos ciudadanos de que nos invade poco a poco el "pasotismo", pero nadie quiere darse cuenta de que estamos en el mismo cauce para entrar de lleno en una Autocracia, y más después de haber visto esta degradación política a la que nos está llevando Sánchez y sus presuntos socios vampiros.

A ver quién respira al lado del Líder y no se contagia del poder y del reforzamiento de Sánchez, consiguiendo un equipo firme, fuerte y agresivo. Las cosas han cambiado tanto que según el ciudadano, parece que entiende menos de la política que se hace, y más si es la que derivó de unas elecciones que a todas luces fueron limpias y transparentes.

Sin llegar a pensarlo mucho después de ver tanta barbaridad no nos extraña que, por esa regla de tres, por empeño, por cabezonería, por entrometido, por meterse en donde no le llaman, por seguir en sus trece y no aflojar ni un ápice en su forma de hacer política (que es simplemente para estudiarla), nuestro Presidente Pedro Sánchez quieren que sea el candidato en un año como este, en donde en todos los saraos se encuentray a todas las reuniones acude (si le interesa), quedando siempre como el aceite, aunque los socios traten de crucificarle con los comportamientos catetos que exhiben, cada vez que hablan de política internacional. Por todo eso piden que sea digno de que se le dé el Nobel de la Paz.